Desde la costa, Marcos Quiroga nos hace llegar ésta denuncia.

El señor en el video del link se llama Gabriel Quiroga (aka Pichiquin), vive en Mar de Ajó y es mi papá. En sus ratos libres (maneja dos comercios, dibuja planos, es un referente de la lucha por los derechos humanos en la costa, es un experto jugador de paddle) se dedica a presidir la Asociación cooperadora de la Escuela de educación Especial 501 de Mar de Ajó. Además, forma parte de la recreación de dicha escuela para fechas importantes como las patrias y el día del niño, entre otras.
A partir de su rol en la comunidad de Mar de Ajó es muchas veces consultado por los vecinos y varias veces ha rechazado la posibilidad de ocupar un cargo político en el partido de la Costa.
En el video, se explica que el colectivo que utilizan los alumnos (recordemos, estamos hablando de niños con alguna discapacidad) está fuera de servicio por el momento y hace dos meses de esta situación ya que el Consejo Escolar de la zona no cumple con el pago por el arreglo del colectivo.
De más está decir que es un problema fácilmente solucionable, pero por estar en época de elecciones, los funcionarios ni siquiera ven el conflicto. Este tipo de declaraciones demuestran que lo inhumano no sólo aparece cuando acribillan a tres policías, sino también cuando se deja de lado la salud, la paz y la tranquilidad de las personas más necesitadas. Y mirar para otro lado este problema es uno de las tantos disfraces que se calza la más intolerante de las discriminaciones.

Desde ya, se agradece la difusión. Si no les interesa o les molestó recibir este email, les pido disculpas.

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